Buscar este blog

jueves, 20 de noviembre de 2014

PROGRAMA ANALÍTICO 4° AÑO



Programa Analítico
Literatura
4° año, grupos 1,2 y 3

  • Texto portada: En el bosque. Ryūnosuke Akutagawa. Breve biografía del autor, contextualización histórica. Análisis del cuento: identificación y clasificación de los distintos narradores. Fundamentación. El narrador equisciente, interno y subjetivo. Los distintos relatos, su visión sobre el crimen. ¿Quién es el culpable? ¿Quién miente y por qué? El samurái en el Japón feudal. Los elementos de la comunicación en el relato. Similitudes y diferencias con la novela policial.
  • Unidad I: La vida del Lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades. Anónimo. Contextualización histórica, renacimiento español. Orígenes y características de la novela picaresca. Estructura y temas de “El lazarillo de Tormes”. El pícaro como tipo literario. ¿Lázaro es un pícaro? Argumento de cada tratado. Análisis del Prólogo: los distintos receptores; vuestra merced y los lectores, el planteo del caso, tópico de la falsa modestia, fundamentación de la obra, falsa autobiografía, identificación de figuras literarias, el título; clasificación. Tratado I: Lázaro y su familia. Reconocimiento de figuras literarias: polisíndeton. Intertextualidad con otras obras (La Biblia). Parodia de las novelas de caballería. Lázaro y el ciego. Maestro y aprendiz. Los primeros aprendizajes de Lázaro. Episodio del toro en comparación con el episodio del poste. Análisis del episodio del jarro de vino y de la longaniza. Conexiones con el Tratado VII.
  • Unidad II. La lengua de las mariposas. Manuel Rivas. Breve contextualización del autor. Análisis: identificación y clasificación del narrador. Clasificación del título, vínculo con el protagonista Moncho, con el texto y con el contexto en que se desarrolla el relato. Los aprendizajes de Moncho y las enseñanzas de Don Gregorio. Análisis de ambos personajes. Los padres de Moncho, caracterización. Similitudes y diferencias con la película “La lengua de las mariposas”.
  • Unidad III. Fuenteovejuna. Lope de Vega. Breve contextualización del autor, su biografía. Argumento de la obra, caracterización de los personajes principales: Laurencia, Frondoso, el Comendador. Temas de la obra.
  • Unidad IV. Bodas de sangre. Federico García Lorca. Breve contextualización y biografía del autor. Argumento de la obra. Temas. Caracterización de los personajes principales: la novia, el novio, Leonardo y la madre. Identificación y análisis de los distintos símbolos que aparecen en la obra.
  • Unidad V. Rima XI. Gustavo Adolfo Bécquer. Breve contextualización y biografía del autor. El romanticismo en España, caracterización. Análisis de la rima XI, estructura externa e interna. Los diálogos con las tres mujeres, su caracterización. Los posibles temas de la rima.
  • Unidad VI. Romancero. Romance de Gerineldo y la infanta. Origen y características del Romancero Tradicional. Definición y diferentes clasificaciones. Época. Divulgación del romancero. Análisis de Gerineldo y la infanta; identificación de las diferentes características del romancero, tema, personajes, espacio, distintos símbolos, reconocimiento y análisis de distintas figuras literarias.
  • Lectura complementaria: El enamorado y la muerte; argumento, reconocimiento de las principales características del romance.
  • A Dafne. Garcilaso de la Vega. Breve contextualización y biografía del autor. Análisis del soneto: A Dafne. La estructura particular del soneto. Conexiones con el mito. Identificación y análisis de distintos recursos literarios. La metamorfosis, los posibles temas.


Profesora: Sheila Corbo Moreira

PROGRAMA ANALÍTICO 5°AÑO PLAN 2006



Programa Analítico
Literatura
5° Biológico 1

  • Unidad I. Tragedia Griega. Edipo Rey. Sófocles. Orígenes del teatro y la tragedia griega. Contextualización. Mito de Dionisos. Definición de tragedia según Aristóteles, función de la misma (catarsis). Unidades aristotélicas. Infraestructura del teatro griego. Vestimenta, máscaras. Estructura de la tragedia. El mito de Edipo.
  • Análisis del Prólogo. Situación inicial. Vínculos con el mito. Sofrosine. Hamartía. Peripateia. Captatio benevolentiae (parlamento del Sacerdote). Caracterización de Edipo como “buen rey”. Resolución traída por Creonte. Episodio I. La hybris y la até. A través de los parlamentos de Edipo dialogando con Tiresias (caracterización del personaje). La ironía trágica. Evolución del personaje: el poder como corruptor del ser humano (ate) (eje temático). Episodio III. Edipo frente a Creonte. ¿Traición? Edipo: investigador – detective. Inicio de la investigación sobre el asesinato de Layo. Episodio IV y V. Información del mensajero. Continúa la investigación. Interrogatorio al siervo. Episodio V. Anagnórisis de Yocasta y Edipo. Moira.
  • Unidad II. Tragedia Shakesperiana. Mácbeth. William Shakespeare. Contextualización. Vida y obra del autor, principales características de su obra. El teatro isabelino. Caracterización. Ruptura de las unidades aristotélicas. Innovaciones en vestimenta y escenografía. Crónicas de Holinshed sus huellas en la obra de Shakespeare, principalmente en la trama de Mácbeth.
  • Análisis, a partir de actos y escenas seleccionadas (diálogos, monólogos y apartes):Las brujas, caracterización. Ambiente en el que aparecen. La oscuridad.
  • Mácbeth análisis a partir de su presentación indirecta y de sus acciones directas. Su ambición por el poder, el poder como corruptor del ser humano (eje temático). Diferenciación con Banquo. Lady Mácbeth. Su ambición y su locura. Evolución del personaje.
  • Unidad III. Textos de inspiración religiosa. La Biblia. Información general: Origen del término. Composición. Canon. Clasificación de los libros sagrados según el canon Hebreo y según el canon Alejandrino. Géneros literarios y la clasificación de los libros bíblicos. Los nombres de Dios.
  • Análisis: La Biblia. Antiguo Testamento. Génesis I, II y III. Capítulo I. La creación a partir de la verbogénesis: cómo procede y crea la divinidad. Caracterización de esta a partir de su creación. Capítulo II. Análisis comparativo con el capítulo primero. La creación, cómo procede y crea la divinidad. Caracterización de esta. El ensayo y el error para saldar la soledad del hombre. Capítulo III. Estructura. La tentación. Simbología de la serpiente. El pecado. Sus consecuencias; caracterización de la divinidad (su ira, ¿su omnisapiencia?). Identificación de recursos literarios.
  • Análisis de la película The Truman Show. Vínculos con los capítulos analizados del génesis bíblico.
  • Nuevo Testamento: La parábola del hijo pródigo. Lucas 15:11-24. Análisis: El pecado y la misericordia divina. Características de la divinidad.
  • Unidad IV. El mundo medieval y las literaturas vernáculas. La Divina Comedia. Dante Alighieri. Canto I y III. Información general sobre la Edad Media: época, sociedad y religión. La literatura en la Edad Media. La poesía lírica, los trovadores provenzales. La poesía del “Dolce Stil Novo”.
  • La Divina Comedia. Estructura de la obra. Argumento. Título. La alegoría.
  • Análisis: canto I: la perdición del pecado. Simbología de: la selva, la pantera, la loba, el león, cumbre alumbrada por el sol. Identificación y análisis de distintos recursos literarios: símil, metáforas, anáforas. Dante autor – Dante personaje. Virgilio: su presentación y función como guía. La presentación de los tres reinos de ultratumba. Canto III: inscripción de la puerta del infierno, identificación y análisis de los recursos que allí aparecen. El ambiente infernal; cielo sin estrellas (entre otros). El río Aqueronte y la figura de Caronte (su presentación). Los pecados por similitud y por oposición.
  • Análisis comparativo del canto III con el cuento Regreso al Aqueronte de Héctor Galmés.
  • Unidad V. El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha. Miguel de Cervantes Saavedra. Primera parte, capítulo I y III. Contextualización del autor y su obra. La novela moderna. Novela picaresca, pastoril y de caballería: caracterización. La parodia a las novelas de caballería.
  • Análisis: Capítulo I: la locura: proceso de transformación de Alonso “Quijano” en “Don Quijote de la Mancha”. La parodia de las novelas de caballería a través de la presentación del personaje. Capítulo III: ilusión y realidad: a través de la oposición entre Don Quijote y el ventero. La figura del pícaro. El humor.


Profesora: Sheila Corbo Moreira.

lunes, 20 de octubre de 2014

GRUPO 5° Biológico 1

Enlace para descargar "Don Quijote de la Mancha":

http://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/el-ingenioso-hidalgo-don-quijote-de-la-mancha--0/html/

Recuerden: el capítulo III es el que van a usar para hacer el trabajo y el I es el que vamos a analizar en clase, por tanto, lean e impriman los dos.

jueves, 25 de septiembre de 2014

RIMA XI

GRUPOS: 4°1, 4°2, y 4°3

RIMA XI

- Yo soy ardiente, yo soy morena,
yo soy el símbolo de la pasión,
de ansia de goces mi alma está llena:
¿A mí me buscas? - No es a ti: no.

- Mi frente es pálida, mis trenzas de oro:
puedo brindarte dicha sin fin,
yo de ternura guardo un tesoro
¿A mí me llamas? - No, no es a ti.

- Yo soy un sueño, un imposible,
vano fantasma de niebla y luz;
soy incorpórea, soy intangible:
no puedo amarte. - ¡Oh ven; ven tú!

Bécquer, G.A. Rimas. Espasa - Calpe. S.A. Ed. de J. P. Díaz

domingo, 21 de septiembre de 2014

FUENTEOVEJUNA / BODAS DE SANGRE

GRUPOS: 4°1, 4°2 Y 4°3

Les dejo los enlaces para las próximas obras que vamos a trabajar y sobre las que ya tienen tareas asignadas. BUENA LECTURA!!!

FUENTEOVEJUNA: http://www.ciudadseva.com/textos/teatro/esp/vega/fuenteovejuna1.htm

BODAS DE SANGRE: http://usuaris.tinet.cat/picl/libros/glorca/gl003900.htm


domingo, 7 de septiembre de 2014

POEMA: A DAFNE


GRUPOS 4°1, 4°2 Y 4°3



XIII

A Dafne ya los brazos le crecían,
y en luengos ramos vueltos se mostraban;
en verdes hojas vi que se tornaban
los cabellos que el oro escurecían.

De áspera corteza se cubrían 
los tiernos miembros, que aún bullendo estaban;
los blancos pies en tierra se hincaban,
y en torcidas raíces se volvían.

Aquel que fue la causa de tal daño,
a fuerza de llorar, crecer hacía
el árbol que con lágrimas regaba.

¡Oh miserable estado, o mal tamaño!
¡Que con llorarlla cresca cada día
la causa y la razón porque lloraba!



Garcilaso de la vega. Obras. Colección Austral. Madrid. 1961

martes, 26 de agosto de 2014

Selección de cantos de La Divina Comedia


5º Biológico 1
Canto I

A mitad del camino de la vida,
en una selva oscura me encontraba
porque mi ruta había extraviado

¡Cuán dura cosa es decir cuál era
esta salvaje selva, áspera y fuerte
que me vuelve el temor al pensamiento!

Es tan amarga casi cual la muerte;
mas por tratar del bien que allí encontré,
de otras cosas diré que me ocurrieron.

Yo no se repetir cómo entré en ella
pues tan dormido me hallaba en el punto
que abandoné la senda verdadera.

Mas cuando hube llegado al pie de un monte,
allí donde aquel valle terminaba
que el corazón habíame aterrado,

hacia lo alto miré, y vi que su cima
ya vestía los rayos del planeta
que lleva recto por cualquier camino.

Entonces se calmó aquel miedo un poco,
que en el lago del alma había entrado
la noche que pasé con tanta angustia.

Y como quien con aliento anhelante,
ya salió del piélago a la orilla,
se vuelve y mira el agua peligrosa,

tal mi ánimo, huyendo todavía,
se volvió para mirar de nuevo el sitio
que a los que viven traspasar no deja.

Repuesto un poco el cuerpo fatigado,
seguí el camino por la yerma loma,
siempre afirmando el pie de más abajo.

Y vi, casi al principio de la cuesta,
una onza ligera y muy veloz,
que de una piel con pintas se cubría;

y de delante no se me apartaba,
mas de tal modo me cortaba el paso,
que muchas veces quise dar la vuelta.

Entonces comenzaba un nuevo día,
y el sol se alzaba al par de las estrellas
que junto a él el gran amor divino

sus bellezas movió por vez primera;
así es que no auguraba nada malo
de aquella fiera de la piel manchada

la hora del día y la dulce estación;
mas no tal que terror no produjese
la imagen de un león que luego vi.

Me pareció que contra mí venía,
con la cabeza erguida y hambre fiera,
y hasta temerle parecía el aire.

Y una loba que todo el apetito
parecía cargar en su flaqueza,
que ha hecho vivir a muchos en desgracia.

Tantos pesares esta me produjo,
con el pavor que verla me causaba
que perdí la esperanza de la cumbre.

Y como aquel que alegre se hace rico
y llega luego un tiempo en que se arruina,
y en todo pensamiento sufre y llora:

tal la bestia me hacía sin dar tregua,
pues, viniendo hacia mí muy lentamente,
me empujaba hacia allí donde el sol calla.

Mientras que yo bajaba por la cuesta,
se me mostró delante de los ojos
alguien que, en su silencio, creí mudo.

Cuando vi a aquel en ese gran desierto
<<Apiádate de mí - yo le grité -,
seas quien seas, sombra u hombre vivo>>

Me dijo: <<Hombre no soy, mas hombre fui,
y a mis padres dio cuna Lombardía
pues Mantua fue la patria de los dos.

Nací sub Julio César, aunque tarde,
y viví en Roma bajo el buen Augusto:
tiempo de falsos dioses mentirosos.

Poeta fui, y canté de aquel justo
hijo de Anquises que vino de Troya,
cuando Ilión la soberbia fue abrasada.

¿Por qué retornas a tan gran pena,
y no subes al monte deleitoso
que es principio y razón de toda dicha?>>

<<¿Eres Virgilio, pues, y aquella fuente
de quien mana tal río de elocuencia'
- respondí yo con frente avergonzada -.

Oh luz y honor de todos los poetas,
válgame el gran amor y el gran trabajo
que me han hecho estudiar tu gran volumen.

Eres tú mi modelo y mi maestro;
el único eres tú de quien tomé
el bello estilo que me ha dado honra.

Mira la bestia por la cual me he vuelto:
sabio famoso, de ella ponme a salvo,
pues hace que me tiemblen pulso y venas.>>

<<Es menester que sigas otra ruta
- me repuso después que vio mi llanto -,
si quieres irte del lugar salvaje;

pues esa bestia, que gritar te hace,
no deja a nadie andar por su camino,
mas tanto se lo impide que los mata;

y es su instinto tan cruel y tan malvado,
que nunca sacia su ansia codiciosa
y después de comer más hambre aún tiene.

Con muchos animales se amanceba,
y serán muchos más hasta que venga
el Lebrel que la hará morir con duelo.

Este no comerá tierra ni peltre,
sino virtud, amor, sabiduría,
y su cuna estará entre Fieltro y Fieltro.

Ha de salvar a aquella humilde Italia
por quien murió Camila, la doncella,
Turno, Euríalo y Niso con heridas.

Este la arrojará de pueblo en pueblo,
hasta que dé con ella en el abismo,
de que la hizo salir el Envidioso.

Por lo que, por tu bien, pienso y decido
que vengas tras de mí, y seré tu guía,
y he de llevarte por lugar eterno,

donde oirás el aullar desesperado,
verás, dolientes, las antiguas sombras,
gritando todas la segunda muerte;

y podrás ver aquellas que contenta
el fuego, pues confían en llegar
a bienaventurados cualquier día;

y si ascender deseas junto a estas,
más digna que la mía allí hay un alma:
te dejaré con ella cuando marche;

que aquel Emperador que arriba reina,
puesto que yo a sus leyes fui rebelde,
no quiere que por mí a su reino subas.

En toda parte impera y allí rige;
allí está su ciudad y su alto trono.
¡Cuán feliz es quien él allí destina!>>

Yo contesté: <<Poeta, te requiero
por aquel Dios que tu no conociste,
para huir de este o de otro mal más grande,

que me lleves allí donde me has dicho,
y pueda ver la puerta de San Pedro
y aquellos infelices de que me hablas.>>
Entonces se echó a andar, y yo tras él. 

Canto III

POR MÍ SE VA HASTA LA CIUDAD DOLIENTE,
POR MÍ SE VA AL ETERNO SUFRIMIENTO,
POR MÍ SE VA A LA GENTE CONDENADA.

LA JUSTICIA MOVIÓ  MI ALTO ARQUITECTO.
HÍZOME LA DIVINA POTESTAD,
EL SABER SUMO Y EL AMOR PRIMERO.

ANTES DE MÍ NO FUE COSA CREADA
SINO LO ETERNO Y DURO ETERNAMENTE.
DEJAD, LOS QUE AQUÍ ENTRÁIS, TODA ESPERANZA.

Estas palabras de color oscuro
vi escritas en lo alto de una puerta;
y yo: <<Maestro, es grave su sentido.>>

Y, cual persona cauta, él me repuso:
<<Debes aquí dejar todo recelo;
debes dar muerte aquí a tu cobardía.

Hemos llegado al sitio que te he dicho
en que verás las gentes doloridas,
que perdieron el bien del intelecto.>>

Luego tomó mi mano con la suya
con gesto alegre, que me confortó,
y en las cosas secretas me introdujo.

Allí suspiros, llantos y altos ayes
resonaban al aire sin estrellas,
y yo me eché a llorar al escucharlo.

Diversas lenguas, hórridas blasfemias,
palabras de dolor, acentos de ira,
roncos gritos al son de manotazos,

un tumulto formaban, el cual gira
siempre en el aire eternamente oscuro,
como arena al soplar el torbellino.

Con el terror ciñendo mi cabeza
dije: <<Maestro, qué es lo que yo escucho,
y quién son estos que el dolor abate?>>

Y él me repuso: <<Esta mísera suerte
tienen las tristes almas de esas gentes
que vivieron sin gloria y sin infamia.

Están mezcladas con el coro infame
de ángeles que no se rebelaron,
no por lealtad a Dios, sino a ellos mismos.

Los echa el cielo, porque menos bello
no sea, y el infierno los rechaza,
pues podría dar gloria a los caídos.>>

Y yo: <<Maestro, ¿qué les pesa tanto
y provoca lamentos tan amargos?>>
Respondió: <<Brevemente he de decirlo.

No tienen estos de muerte esperanza,
y su vida obcecada es tan rastrera,
que envidiosos están de cualquier suerte.

Ya no tiene memoria el mundo de ellos,
compasión y justicia les desdeña;
de ellos no hablemos, sino mira y pasa.>>

Y entonces pude ver un estandarte,
que corría girando tan ligero,
que parecía indigno de reposo.

Y venía detrás tan larga fila
de gente, que creído nunca hubiera
que hubiese a tantos la muerte deshecho.

Y tras haber reconocido a alguno,
vi y conocí la sombra del que hizo
por cobardía aquella gran renuncia.

Al punto comprendí, y estuve cierto,
que esta era la secta de los reos
a Dios y a sus contrarios displacientes.

Los desgraciados, que nunca vivieron,
iban desnudos y azuzados siempre
de moscones y avispas que allí había.

Estos de sangre el rostro les bañaban,
que, mezclada con llanto, repugnantes
gusanos a sus pies la recogían.

Y luego que mirar me puse a otros,
vi gentes en la orilla de un gran río
y yo dije: <<Maestro, te suplico

que me digas quién son, y que designio
les hace tan ansiosos de cruzar
como discierno en la luz escasa.>>

Y él repuso: <<La cosa he de contarte
cuando hayamos parado nuestros pasos
en la triste ribera de Aqueronte.>>

Con los ojos ya bajos de vergüenza,
temiendo molestarle con preguntas
dejé de hablar hasta llegar al río.

Y he aquí que viene en bote hacia nosotros
un viejo cano de cabello antiguo,
gritando: <<¡Ay de vosotras, almas pravas!

No esperéis nunca contemplar el cielo;
vengo a llevaros hasta la otra orilla,
a la eterna tiniebla, al hielo, al fuego.

Y tú que aquí te encuentra, alma viva,
aparta de estos otros ya difuntos.>>
Pero viendo que yo no me marchaba,

dijo: <<Por otra vía y otros puertos
a la playa has de ir, no por aquí;
más leve leño tendrá que llevarte.>>

Y el guía a él: <<Caronte, no te irrites;
así se quiere allí donde se puede
lo que se quiere, y más no me preguntes.>>

Las peludas mejillas del barquero
del lívido pantano, cuyos ojos
rodeaban las llamas, se calmaron.

Mas las almas desnudas y contritas, 
cambiaron el color y rechinaban,
cuando escucharon las palabras crudas.

Blasfemaban de Dios y de sus padres,
del hombre, el sitio, el tiempo y la simiente
que los sembrara, y de su nacimiento.

Luego se recogieron todas juntas,
llorando fuerte en la orilla malvada
que aguarda a todos los que a Dios no temen.

Carón, demonio, con ojos de fuego, 
llamándolos a todos recogía;
da con el remo si alguno se atrasa.

Como en otoño se vuelan las hojas
unas tras otras, hasta que la rama
ve ya en la tierra todos sus despojos,

de este modo de Adán las malas siembras
se arrojan de la orilla de una en una,
a la señal, cual pájaro al reclamo.

Así se fueron por el agua oscura,
y aún antes de que hubieran descendido
ya un nuevo grupo se había formado.

<<Hijo mío - cortés dijo el maestro - 
los que en ira de Dios hallan la muerte
llegan aquí de todos los países:

y están ansiosos de cruzar el río,
pues la justicia santa les empuja,
y así el temor se transforma en deseo.

Aquí no cruza nunca un alma justa,
por lo cual se Carón de ti se enoja,
comprenderás qué cosa significa.>>

Y dicho esto, la región oscura
tembló con fuerza tal, que del espanto
la frente del sudor aún se me baña.

La tierra lagrimosa lanzó un viento
que hizo brillar un relámpago rojo
y, venciéndome todos los sentidos,
me caí como el hombre que se duerme.

Canto V

Así bajé al círculo primero
al segundo que menos lugar ciñe, 
y tanto más dolor, que l llanto mueve.

Allí el horrible Minos rechinaba.
Ala entrada examina los pecados; 
juzga y ordena según se relíe.

Digo que cuando un alma mal nacida
llega delante, todo lo confiesa;
y aquel conocedor de los pecados

ve el lugar del infierno que merece:
tantas veces se ciñe con la cola,
cuantos grados él quiere que sea echada.

Siempre delante de él se encuentran muchos;
van esperando cada uno su juicio,
hablan y escuchan, después las arrojan.

<<Oh tú que vienes al doloroso albergue
- me dijo Minos en cuanto me vio,
dejando el acto de tan alto oficio -;

mira cómo entras y de quién te fías:
no te engañe la anchura de la entrada.>>
Y mi guía: <<¿Por qué le gritas tanto?

No le entorpezcas su fatal camino;
así se quiso allí donde se puede
lo que se quiere, y más no me preguntes.>>

Ahora comienzan las dolientes notas
a hacérseme sentir; y llego entonces
allí donde un gran llanto me golpea.

Llegué a un lugar de todas luces mudo,
que mugía cual mar en la tormenta,
si los vientos contrarios le combaten.

La borrasca infernal que nunca cesa,
 en su rapiña lleva a los espíritus;
volviendo y golpeando les acosa.

Cuando llegan delante de la ruina,
allí los gritos, el llanto y el lamento;
allí blasfeman del poder divino.

Comprendí que a tal clase de martirio
los lujuriosos eran condenados,
que la razón someten al deseo.

Y cual los estorninos forman de alas
en invierno bandada larga y prieta,
así aquel viento  los malos espíritus:

arriba, abajo, acá y allí les lleva;
y ninguna esperanza les conforta,
no de descanso, mas de menor pena.

Y cual las grullas cantando sus lays
largas hileras hacen en el aire,
así las vi venir lanzando ayes,

a las sombras llevadas por el viento.
Y yo dije: <<Maestro, quién son esas
gentes que el aire negro así castiga?>>

<<L primera e la que las noticias
quieres saber - me dijo aquel entonces -
fue emperatriz sobre muchos idiomas.

Se inclinó tanto al vicio de la lujuria,
que la lascivia licitó en sus leyes,
para ocultar el asco al que era dada:

Semíramis es ella, de quien dicen
que sucediera a Nino y fue su esposa:
mandó en la tierra que el sultán gobierna.

Se mató aquella otra, enamorada,
traicionando el recuerdo de Siqueo;
la que sigue es Cleopatra lujuriosa.

A Elena ve, por la que tantas víctimas
el tiempo se llevó, y ve al gran Aquiles
que por Amor al cabo combatiera;

ve a París, a Tristán.>> Y a mas de mil
sombras me señaló, y me nombró, a dedo,
que Amor de nuestra vida les privara.

Y después de escuchar a mi maestro
nombrar a antiguas damas y caudillos,
les tuve pena, y casi me desmayo.

Yo comencé: <<Poeta, muy gustoso
hablaría a esos dos que vienen juntos
y parecen al viento tan ligeros.>>

Y él a mí: <<Lo verás cuando ya estén
más cerca de nosotros; si les ruegas
en nombre de su amor, ellos vendrán.>>

Tan pronto como el viento allí los trajo
alcé la voz:<<Oh almas afanadas,
hablad, sino os lo impiden, con nosotros.>>

Tal palomas llamadas al deseo,
 al dulce nido con el ala alzada,
van por el viento del querer llevadas,

ambos dejaron el grupo de Dido
y en el aire malsano se acercaron,
tan fuerte fue mi grito afectuoso:

<<Oh criatura graciosa y compasiva
que nos visitas por el aire perso
a nosotras que el mundo ensangrentamos;

si el Rey del Mundo fuese nuestro amigo
rogaríamos de él tu salvación,
ya que te apiada nuestro mal perverso.

De lo que oír o lo que hablar os guste,
nosotros oiremos y hablaremos
mientras que el viento, como ahora, calle.

La tierra en que nací está situada
en la Marina donde el Po desciende
y con sus afluentes se reúne.

Amor, que a todo amado a amar le obliga,
prendió por este en mí amor tan fuerte
que, como ves, aún no me abandona.

El Amor nos condujo a morir juntos,
y a aquel que nos mató Caína espera.>>
Estas palabras ellos nos dijeron.

Cuando escuché a las almas doloridas
bajé el rostro y tan bajo lo tenía,
que el poeta me dijo al fin: <<¿Qué piensa?>>

Al responderle comencé: <<Qué pena,
cuánto dulce pensar, cuánto deseo,
a estos condujo a paso tan dañoso.>>

Después me volví a ellos y les dije,
y comencé: <<Francesca, tus pesares
llorar me hacen triste y compasivo;

dime, en la edad de los dulces suspiros
¿cómo o por qué el Amor os concedió
que conocieses tan turbios deseos?>>

Y repuso: <<Ningún dolor más grande
que el de acordarse del tiempo dichoso
en la desgracia; y tu guía lo sabe.

Mas si saber la primera raíz
de nuestro amor deseas de tal modo,
hablaré como aquel que llora y habla:

Leíamos un día por deleite,
cómo hería el amo a Lanzarote;
solos los dos y sin recelo alguno.

Muchas veces los ojos suspendieron
la lectura, y el rostro emblanquecía,
pero tan solo nos venció un pasaje.

Al leer que la risa deseada
era besada por tan gran amante,
este, que de mi nunca ha de apartarse,

la sonrisa me besó, todo temblando.
Galeotto fue el libro y quien lo hizo;
no seguimos leyendo ya ese día.>>

Y mientras un espíritu así hablaba,
lloraba el otro, tal que de piedad
desfallecí como si me muriese;
y caí como un cuerpo muerto cae.

Extraído de:
Alighieri, Dante. Divina Comedia. Ed. Cátedra. Madrid. 2006.




lunes, 25 de agosto de 2014

Información sobre Dante y "La Divina Comedia"


5°Biológico 1.

CONTEXTUALIZACIÓN HISTÓRICA

La Edad Media  es un extenso período histórico que abarcó alrededor de diez siglos; desde el siglo V al XV aproximadamente, por ello conviene dividirla en dos etapas.

Alta Edad Media

En esta época es posible hablar de oscurantismo, en la medida en que el derrumbe de las estructuras del imperio romano, la permanente amenaza de los bárbaros y la supremacía religiosa de un cristianismo que pone el énfasis en una vida ultraterrenal traen aparejados la imagen de un hombre culpable por el hecho de ser tal, abrumado por el fin del mundo y su inevitable perdición.
En el plano de la teología es de destacar el pensamiento de San Agustín (siglo V), quien ve la evolución de la historia humana como una manifestación de la voluntad de Dios. El hombre, ser imperfecto por naturaleza es para este pensador salvado únicamente por la gracia divina que elige para estos fines solo a unos pocos, mientras la inmensa mayoría será condenada a las llamas del infierno.
En el plano intelectual, esta época se caracteriza porque en ella la idea de progreso es completamente desconocida. Busca conservar fielmente lo antiguo y lo tradicional. Los valores supremos están fuera de duda y se encuentran encerrados en formas enteramente válidas.
Sobre el fin de este período y como coronación del espíritu del mismo se impone en la arquitectura el estilo románico, las llamadas "fortalezas de Dios", edificaciones caracterizadas por su pesadez, sus gruesas paredes, sus escasas aberturas que impiden el contacto con el exterior, hablan de un hombre encerrado, temeroso de lo externo y agobiado por la presencia de un Dios distante y duro.

Baja Edad Media

Se caracteriza por un renacer en todos los planos de la actividad humana.
Las ciudades comienzan a surgir y vuelven a ser un lugar de encuentro y de puesta en contacto con el mundo; se dan los comienzos de una economía monetaria y mercantil.
Los caminos se animan y comienzan a llenarse de mercaderes y viajeros; las clases altas descubren el placer de aparentar, de brillar en los acontecimientos mundanos y el lujo en el vestido, en la mesa o en la ornamentación de la casa comienza a ser un signo de poder y un elemento de disfrute de lo terrenal y cotidiano.
La iglesia acompaña el movimiento procurando disciplinar su clero y la actividad de los laicos, en este sentido se debe señalar el movimiento cluniciense (siglo X) que procura devolver la pureza original a las instituciones religiosas y separadas de lo material, seguido luego por el movimiento cartujo y cistersiense del siglo XI y XII. la misma visión de la divinidad cambia y ahora el hombre se siente protegido por un amoroso ser superior al cual puede llegar a través de la invocación de los santos o de la virgen.
En la arquitectura; la aparición del gótico da lugar al cambio más profundo de la historia del arte moderno.
El hombre se yergue nuevamente sobre la tierra y, aunque no olvida la posibilidad de los castigos del más allá, ahora esta vida lo invita a disfrutar, se plantea como digna de ser vivida. El culto a la Virgen María pasa a un primer plano y se la ve como intermediaria ideal entre el hombre y Dios.
El oscurantismo ha dado paso a la luz, la desesperanza a la fe, la valoración de lo ultraterrenal a la valoración de los que pertenece a este mundo y precisamente en esta transición, en este dualismo es que debemos acercarnos al hombre de esta época.

Literatura

En la literatura se observa la maduración de la herramienta expresiva, la lengua, que desprendida del latín original, a lo largo de la Edad Media va a evolucionar a lo que conocemos como lenguas romances. Si bien, el latín conservará su puesto como lengua erudita, poco a poco estas nuevas manifestaciones  lingüísticas irán ganando terreno hasta llegar al punto de llegar a poder expresar poéticamente todas las inquietudes del hombre.
Esta literatura da sus primeros frutos en la épica, y es así que surgen los cantares de gesta.
La evolución de la épica sentará las bases de la sensibilidad occidental.
Ahora veremos el desarrollo de este género en tres grandes pasos: la lírica trovadoresca, la escuela de Sicilia y el Dolce Stil Nuovo, llegando así a Dante.
La lírica trovadoresca
Llamamos así, en el estricto sentido de la palabra, a la poesía que fue cultivada por los trovadores, que entre los siglos XI y XII escribieron en la lengua románica, que se conoce con el nombre de "provenzal".
Si bien, geográficamente ubicamos su núcleo en Provenza, no debemos olvidar que esta literatura no aparece vinculada a lo que hoy llamamos una nacionalidad; en esta época la zona del medio día de las Galias estaba dividida en señoríos más o menos independientes, y por encima de esta división política hay una unidad lingüística que permite que todos colaboren en el hacer de determinado tipo de literatura.
El trovador es el poeta que, además de escribir sus versos compone la música con la que deben ser acompañados; es una poesía destinada a ser cantada y a ser escuchada por un público que, en su mayoría y más aún si la ejecución se daba en la plaza, es analfabeto.
A partir del siglo XIII las costumbres sociales evolucionan hacia un mayor refinamiento; la vivienda señorial se hace más refinada y las reuniones sociales son habituales. La mujer comienza a ejercer un rol protagónico como señora del castillo y centro de la vida social incipiente. En este marco la lírica trovadoresca desarrolla un concepto de amor; el amor cortés, que implica una traslación del vasallaje político al campo sentimental; la dama es el ser superior al que el enamorado rinde culto y ofrece su vida como servicio, de tal manera que la llama "midons", mi señora. Este sentimiento exige de la discreción del poeta en la medida en que la amada ha de ser, casi forzosamente, casada; es este pues un amor adúltero basado en el axioma de que no puede haber  "buen amor verdadero" en el matrimonio. La dama aparece como figura idealizada, distante, vista como poseedora de las máximas virtudes, tanto físicas como morales, origen y destinataria del hacer poético. Esta idealización no nos debe hacer pensar en el desprecio o censura absoluta hacia el aspecto físico del amos, pues a pesar de que se ha querido hablar de un sentimiento exclusivamente platónico, son muchos los poetas que nos hablan de sus logros en este terreno.

La escuela de Sicilia

En la corte de Federico II (1194 - 1250) y luego en la de su hijo Manfredi muerto en 1266, se sitúa el centro de la vida intelectual de este momento. Allí tuvieron lugar las primeras traducciones del árabe y del griego de los textos filosóficos  y científicos de la Antigüedad, y también de ese ambiente de refinada aristocracia surgiendo numerosos poetas. Nacidos en diversas ciudades italianas son llamados todos "sicilianos" ya que el emperador tenía el título de rey de Sicilia.
El mérito de ser la primera escuela lírica italiana no impide reconocer el hecho de su falta de originalidad, estos poetas tienen delante de si un modelo, la poesía provenzal, y repiten los temas, los motivos y hasta la misma métrica. La dama es lejana, bella y soberbia como señora feudal y el poeta le habla como vasallo en tono de extrema humildad. La monotonía que implica la repetición es disimulada únicamente, por una habilidad técnica muy importante y presente en casi todos ellos.
Después de la batalla de Benevento (1266) el centro de la actividad cultural y literaria se desplaza a Toscana (Florencia), donde en un primer momento se van a encontrar las mismas normas estéticas, pero ya con Guittone del Viva D'Arezzo comienza a evolucionar hasta encontrar una voz propia de los poetas del Dolce Stil.

La poesía del Dolce Stil Novo

Vinculados estrechamente a la concepción de amor cortés tal como la cantaban los trovadores provenzales, procurando reacción contra las convenciones y la frialdad de las composiciones de la escuela Siciliana, los poetas del Dolce Stil Novo profundizan en los conceptos heredados de esta tradición lírica hasta el punto de elaborar una verdadera filosofía del amor que toma formas en creaciones reveladoras de un gran dominio técnico y una exquisita sensibilidad.
Loa integrantes de esta escuela son: Guido Guinizelli, Guido Cabalcanti, Cino da Pistoia y Dante.
Uno de los conceptos más importantes de esta escuela lírica es: la correspondencia entre amor y corazón gentil. Esta gentileza espiritual no debe entenderse como nobleza de sangre o producto de la herencia sino como la posesión de las cualidades imprescindibles para sentir amor. Existen juntos el uno y el otro, su unión es indisoluble y va mucho más allá de la voluntad o cualquier otro poder.
La figura de la dama, idealizada ya por la lírica trovadoresca, llega en el Dolce Stil a su punto culminante y su belleza física y espiritual es el estímulo para hacer vibrar lo más noble del corazón del amante, el mismo poeta que encuentra a través de ella el camino a la perfección y a la verdad.
La poesía de Dante muestra de manera incomparable la imagen de la "donna angelicata", la mujer ángel, la idealización más pura del stilnovismo.
En el corazón gentil irrumpe el amor ante la visión de la dama, esa fuerza amable pero feroz a la vez, enajenante, produce todo un registro de particulares sensaciones, pensamientos, placeres y dolores, y el poeta del Dolce Stil se vuelca complacido a la contemplación de sí mismo y a la recreación poética de todo lo que pasa dentro de su pecho. Amar, sufrir, gozar, pero sobre todo, complacerse en el sentimiento, recrearlo, analizarlo, e aquí uno de los grandes hallazgos de este movimiento. Mientras que la mujer aparece con una sonrisa o una mirada distante, los estremecimientos del alma que ella produce son seguidos punto por punto en definitiva hay un enamoramiento de verse amar que se explota líricamente.
Pero ser víctima de "AMOR" significa el ingreso a un mundo extraño, casi sobrenatural, y si es un signo de distinción de espíritu poder sentir de esta forma, también es una condena, u terrible dolor que se vincula con la muerte.

Dante - breve biografía

Nace en mayo de 1265 en Florencia.
Conoce a Beatriz en mayo de 1274, de ella se habría enamorado, esta será inmortalizada en su obra.
Beatriz muere en 1290.
Se casa en 1295 y empieza su actividad política.
En 1302 es exiliado.
El 14 de setiembre de 1321 muere en Ravena.

La Divina Comedia; su título


La Comedia, conocida desde el siglo XVI bajo el título de La Divina Comedia es un extenso poema escrito por Dante en lengua vulgar, abarcando un total de 14333 versos, obra máxima de la literatura italiana cuyas primeras ediciones se remontan a 1472.
Dante denominó a su obra Comedia, el calificativo Divina es agregado posteriormente por sus admiradores, aludiendo tanto a su calidad estética, como a su sustancia religiosa.
"Comedia" es uno de los subgéneros del drama, sin embargo, la composición de Dante no tiene la estructura formal de este género; lo que sucede es que en la época que escribe el poeta florentino se ponía mayor atención al contenido, para determinar la pertenencia a un género determinado, que a la forma. Es así que para que una obra fuera "comedia" debía comenzar en la tristeza y terminar en alegría y, evidentemente, el viaje del personaje central comienza en un momento de dolor, perdido en la "selva oscura", para luego de diversas pruebas, terminar en la mayor de las felicidades: ver a Dios y obtener la salvación de su alma.
Generalmente se ubica la composición de la Divina Comedia en los últimos y más dolorosos años de Dante, los del exilio. Toda la crítica coincide en que el "Infierno" habría sido terminado alrededor de 1308, el "Purgatorio" hacia 1313 y el "Paraíso" poco antes de su muerte.

Argumento

Es la narración de un viaje realizado por su propio autor, Dante, que asume la condición de narrador y personaje, por los tres reinos de ultratumba; infierno, purgatorio y paraíso, según eran concebidos por la iglesia de la época. La obra comienza con el personaje perdido en la "selva oscura" (el pecado) y acorralado por tres fieras que le impiden la salida de ese paraje; gracias a la intervención de la sombra de Virgilio, poeta latino, emprenderá el viaje que lo sacará de esta situación primera, y en cuyo recorrido verá los castigos eternos a los que son sometidos las almas de los condenados, los suplicios de aquellos que, habiéndose salvado aún deben someterse a un proceso de purificación, y, por último, habiendo sido dejado por Virgilio que cede su lugar de guía a Beatriz, Dante verá la alegría de los bienaventurados, los que han logrado la salvación eterna.
La idea de localizar la acción de la obra en el espacio que se abre más allá de la muerte, no es original de Dante, lo que sí es innovador es, en el plano de la narración; el proponer la experiencia como algo real, un viaje y no una visión, y elegirse a sí mismo como protagonista. Dentro del plano de las ideas, una fuerza totalizadora que organiza al otro mundo según claras normas morales y la idea de perfeccionamiento del hombre que le conduce a la salvación.

Estructura formal

La obra está dividida en tres partes, denominadas cánticas y que responden, cada una de ellas, a los tres reinos en que la tradición cristiana considera está estructurado el más allá: Infierno, Purgatorio y Paraíso.
Cada cántica, está dividida en treinta y tres cantos, excepto la primera que tiene treinta y cuatro, el primer canto es considerado como una introducción general a la obra. Sumados todos nos dan un total de cien cantos. La estructura de cada parte respeta un plan muy estricto; los cantos oscilan entre los ciento quince versos y los ciento cincuenta y cuatro y el número total de versos que componen las tres cánticas es catorce mil trescientos treinta y tres para el poema entero.
La obra esta escrita en versos endecasílabos y la estrofa empleada es el terceto (terzina), donde coinciden el primer con el tercer verso, mientras que el segundo marca la rima para la terzina siguiente: aba - bcb - cdc. Cada canto termina con un cuarteto para no dejar un verso suelto.
Toda esta estructuración se basa en la utilización cabalística de ciertas cifras: el 3 es un número perfecto, el número de la Santísima Trinidad y de allí la reiteración de esta cifra en la estructura; el 9 es un número místico y sagrado, resulta de la multiplicación del tres por sí mismo, el 33 también posee significado cabalístico en la medida en que reitera el 3, el 1 la unidad, representa la divinidad.

Los tres reinos

El Infierno

Guiado por Virgilio, Dante llega al Infierno, es en el canto III donde se ingresa a este reino, la inscripción en su puerta nos dará las características fundamentales del mismo: la ciudad del dolor eterno, habitada por la gente perdida, ninguna esperanza de perdón o reconciliación pueden albergar los que allí pagan su culpa.
Físicamente este mundo está dividido en nueve círculos en los que se ubica a las almas pecadoras de acuerdo a determinadas normas; cuanto más abajo menor será el espacio y mayor la culpa y el castigo. Esta división espacial se corresponde con una estratificación moral; siguiendo la distinción aristotélica de las tres disposiciones viciosas del alma humana, incontinencia, bestialidad y malicia. Dante agrupa dentro de la primera a los lujuriosos, glotones, avaros, pródigos e iracundos, dentro de la tendencia a la "bestialidad" coloca a los herejes y violentos, para terminar con los maliciosos que incluyen a los traidores y fraudulentos. Es de destacar cómo el mayor grado de racionalidad que implica un pecado para concretarse agrava la culpa, los habitantes de los primeros círculos no hicieron otra cosa que dejarse dominar por pasiones inherentes a la esencia humana, mientras que los últimos utilizaron su capacidad intelectual para hacer el mal.
La oscuridad, reflejo físico de la condición moral del alma de los condenados, domina este mundo, este "aire sin estrellas" que se hace más alucinante en la medida que se llena de gritos de dolor y terribles blasfemias, expresión de la ira y la impotencia de las almas pecadoras ante la justicia divina. Es este el reino donde el recuerdo de la tierra está más presente, no solo a través de las vivencias de cada uno de los que allí habitan, sino de la indiscutible  "corporeidad" que asumen las almas.
Habitado no solo por almas sino también por gusanos, perros y serpientes que colaboran con la función de los demonios, extraídos muchos de ellos del mundo mitológico grecolatino, en el vértice mismo del cono, Lúcifer, el ángel caído concentra en su figura el terror del Infierno.
El castigo tendrá evidente relación con la culpa; esta relación puede ser de similitud, como en el caso de los lujuriosos arrastrados eternamente por el viento como en vida se dejaron arrastrar por la pasión, o los suicidas, que habiendo atentado contra su cuerpo se ven obligados a renunciar a él; o de oposición a la culpa, como el caso de los "indiferentes", que no habiendo hecho una opción en vida se ven obligados ahora a experimentar el acicate de los moscones y las avispas y a correr detrás de una bandera. Todos estos castigos cobran una verdadera dimensión a través de dos condiciones de mayor abstracción: son eternos, es decir, el condenado no tiene ninguna esperanza de que cesen y no tienen otra significación que la del dolor que ellos producen, ya que se repetirán identicamente por siempre, sin que sirvan para disminuir la culpa.

Purgatorio

Está ubicado en la Tierra y las almas sufren tormentos similares a los infernales, es, sin embargo, , el reino de la esperanza, pues los que allí habitan ya se han salvado, aspiran con certeza a ver a Dios y el sufrimiento es para ellos una vía de purificación que acelerará el tránsito a la gloria.
Convencidos ya de la vanidad de las cosas terrenas, aspirando a gozar la gloria, las almas se hacen aquí menos corpóreas, más puras en su calidad de espíritus, y su registro emotivo deja de lado la violencia pasional de las almas infernales para teñirse de dulce melancolía, los gritos son sustituidos por el canto  a coro, en el infierno las almas están encerradas en su individualidad, aquí unidas en el amor, trascienden sus límites para unirse en alabanza al creador. Los demonios son remplazados por visiones angélicas que hablan de la proximidad del paraíso.
Geográficamente el Purgatorio se ubica en una isla inaccesible del hemisferio austral, en las antípodas de Jerusalén. Concebido como una montaña esta dividido en tres zonas: en la base una zona rocosa, de difícil acceso: el Antepurgatorio; en el cuerpo del monte, el Purgatorio propiamente dicho, dividido a su vez en siete terrazas, donde el alma se purifica de los siete pecados capitales (soberbia, envidia, ira, pereza, avaricia, gula y lujuria) y,m por fin, en la cúspide una planicie que es el Paraíso terrestre. En este termina la función encomendada a Virgilio, al que está vedado entrar en el reino de los bienaventurados. En la etapa intermedia del Paraíso terrenal (cantos XXVIII a XXXIII, Purgatorio) Virgilio desaparece del lado de Dante y, ante los asombrados ojos de este, aparece Beatriz, símbolo de la teología o la gracia divina única guía posible para caminar por el Paraíso.

Paraíso

Del Paraíso terrenal Dante asciende al Paraíso verdadero atravesando, con la guía de Beatriz, los nueve cielos, esferas concéntricas luminosas y transparentes, sobre las cuales está el cielo empíreo, fijo, cede del mismo Dios, y, entorno a él, las jerarquías celestiales y la rosa de los bienaventurados, iluminada directamente por el propio Señor de la creación. Los nueve cielos son:
1. Cielo de la Luna, cantos I al IV, donde se ubican los espíritus que quebrantaron sus votos.
2. Cielo de Mercurio, cantos V al VIII, ubicación de los espíritus activos y bienechores.
3. Cielo de Venus, cantos VIII al IX, ubicación de espíritus amantes.
4. Cielo del Sol, cantos X al XIII, ubicación de espíritus de teólogos y doctores.
5. Cielo de Marte, cantos XIV al XVII, ubicación de los espíritus que combatieron por la fe.
6. Cielo de Júpiter, cantos XVIII al XX, ubicación de los espíritus justos y sabios.
7. Cielo de Saturno, cantos XXI al XXII, ubicación de los espíritus contemplativos.
8. Cielo de las Estrellas, cantos XXIII al XXVI, ubicación de los espíritus triunfantes.
9. Cielo Cristalino, cantos XXVII al XXXIII, ubicación del Empíreo donde está Dios iluminando la rosa de los Bienaventurados y rodeado de nueve círculos de jerarquías angelicales que son: ángeles, arcángeles, principados, potestades, virtudes, dominaciones, tronos, querubines y serafines.
El criterio utilizado por el autor para colocar las almas en distintas esferas no está, a diferencia de las cánticas anteriores, explicitado en la obra; lo único obvio es que cuanto más cerca de Dios se encuentra el alma, más perfecta es.
Este es el reino del espíritu absolutamente liberado de la carne, el reino de la contemplación y de la más absoluta alegría emanada de la visión de Dios; las almas nada lamentan de lo terreno, nada ansían, están completas en sí mismas. La almas son pura luz y puro amor y de allí que los trazos particulares se disuelvan en mística unión; los elementos terrestres que reaparecen en este reino son solo imagen de aquello que intentan transmitir. Lanzado a la contemplación de la unidad misma de Dios, Dante exclama: "¡Oh cuán insuficiente es la palabra y cómo es débil para expresar mi concepto!", y ese sentimiento puede hacerse extensivo a toda la cántica.
El poema concluye con la palabra "estrellas", que es la misma con la que concluye el Purgatorio, una muestra más de la simetría exterior que se corresponde con la ordenada arquitectura interna.
Extraído de:
Torres, Teresa y Carriquiry, Margarita. Dante. Editorial Técnica s.r.l.
 

sábado, 16 de agosto de 2014

EL ROMANCERO DEFINICIONES Y CARACTERÍSTICAS


4°1, 4°2 Y 4°3
La siguiente información les sirve para el trabajo que tienen que hacer.

El Romancero

Acepciones de la palabra "romance"

El vocablo "romance" significó, en un primer sentido, lengua vulgar, por oposición al latín, cuyo uso era privilegio de los hombres cultos, letrados. también designó, desde la Edad Media, a las nacientes literaturas redactadas en esa lengua neolatina. Asimismo tal denominación sirvió para designar a las gestas épicas que se cantaban o se leían.
Recién a partir de mediados del siglo XV el sentido de la palabra se restringe para denominar, exclusivamente, a las breves composiciones épico - líricas.

DEFINICIONES

El Romance. Definición métrica.

El romance es una serie indefinida de octosílabos con rima asonante en los versos pares.

El romance era, en su origen, una serie indeterminada de versos de dieciséis sílabas, monorrimos y asonantados. Luego, al publicarlos, se prefirió la forma octosilábica que resulta de la división del verso primitivo  en sus hemistiquios. De tal suerte el romance, pasó a integrar una tirada de versos asonantados en las líneas pares.

El Romance. Definición poética.

El romance es un breve poema épico lírico destinado al canto.
Épico, porque en el romance se narra, se cuenta algo; lírico, porque al mismo tiempo eso contado se impregna de la subjetividad (sentimientos, recuerdos, sueños, etc.) del poeta y el cuento se hace entonces canto. Pero además en los romances, frecuentemente la narración cede paso a la palabra, al discurso de los personajes. El cuento se transforma en acción, en drama.

El Romancero

Es de un modo genérico, el conjunto de los romances tradicionales (populares, anónimos, variables) que se generan en las postrimerías de la Edad Media (siglos XIII a XV) y a comienzos del siglo XVI. Más concretamente, el término designa la colección de esos romances.

ORÍGENES

1. La epopeya

a) La refundición de los cantares de gesta. Nuevos poemas.

Los romances heroicos surgieron de los viejos cantares de gesta. Los juglares realizan una labor que determina la continuidad del género cuando este corre el riesgo de agotarse. así, los viejos poemas son reelaborados, mediante adiciones, variantes, etc. que los renuevan parcialmente sin cambiar su núcleo fundamental. esas reelaboraciones escritas se denominan refundiciones.

b)Desprendimiento de ciertos trozos de epopeya.

1° etapa: Divulgación popular
Todo ese material era cantado por los juglares ante un público heterogéneo, en las cortes o en las plazas. La parte más gustada se desprende del cantar, adquiere vida independiente y es cantada por el pueblo, que la repite para recrearse , en sus casas, en sus tareas o en sus momentos de esparcimiento. La melodía musical y el formulismo épico facilitan la memorización de estos trozos que, además, son de breve extensión.

2° etapa: el canto, se hace tradicional.
A través del tiempo, abolida la novedad del canto, este se considera parte integrante de un patrimonio común; su antigüedad lo valoriza, ya que es el legado de varias generaciones, transmitido de abuelos a padres y de padres a hijos.

2. Los sucesos coetáneos

Al lado de los romances surgidos de las viejas fuentes heroico caballerescas se encuentran otros, que cantan hechos histórico contemporáneos. Romances que tienen la finalidad de noticiar los acontecimientos de la época. El motivo de su composición es, sin duda, utilitario: se procura conmover o interesar a la opinión pública en la cuestión político - militar. Su uso se extendió en el siglo XV, especialmente durante los reinados de Enrique IV (1454 - 1474) y de los Reyes Católicos (1474 - 1516) cuando la guerra contra los moros llegaba a su fin.
Los hechos coetáneos promueven la creación de un tipo particular de romances llamado noticieros en virtud de su finalidad, que es la de hacer memorable los hechos que cantan.
Dentro de esta categoría debe incluirse a los romances denominados fronterizos, designación que deriva del lugar en que surgen: la frontera que separa dos razas, dos culturas (la española y la mora), que en el siglo XV, cuando culmina la reconquista, se sitúan principalmente alrededor de Granada, último baluarte de los infieles. Fueron compuestos por juglares castellanos, sobre quienes se ejerce el evidente influjo de la cultura, el estilo y la sensibilidad del enemigo secular. También están aquí los romances moriscos.

3. Canciones novelescas y líricas, de diverso origen.

Cantos estrictamente de tema novelesco, incluiremos aquí: ciclo carolingio (el emperador Carlomagno), ciclo bretón (el rey Artús y los caballeros de la Tabla Redonda). Estos temas novelescos se caracterizan por poseer una validez humana universal, a diferencia de los temas heroico - nacionales estrictamente españoles e introducen los temas eternos de la aventura, el misterio, el amor y la muerte.

CLASIFICACIÓN DEL ROMANCERO

Existen varios criterios para clasificar a los romances. Uno es el que atiende a la época en que fueron creados (clasificación temporal: romances viejos o tradicionales,(del siglo XIII a mediados del XVI) romances nuevos o artísticos los que surgen luego de la segunda mitad del siglo XVI , debido a poetas perfectamente individualizados. Otro el que pone el acento en el origen de la creación: juglarescos, trovadorescos, cuando son creados por poetas de las cortes; artísticos, los debidos a artistas nominados. Otro, finalmente, el que los cataloga en función de su naturaleza.
De acuerdo a este criterio encontramos los siguientes grupos:
Romances heroico - caballerescos; son los romances derivados de los cantares de gesta, mejor dicho, de sus refundiciones muy novelizadas.
Romances histórico contemporáneos; son los que nacen con la finalidad de "noticiar" memorables hechos de la época, en esta categoría se debe incluir; los fronterizos y los moriscos.
Romances novelescos; son los que desarrollan un tema imaginativo de modo bastante completo y pormenorizado.
Romances líricos; predomina en ellos la sensibilidad, la emoción personal del poeta. Pueden nacer como tales, pero en general llegan a serlo por fragmentación de uno novelesco.

CARACTERES DEL ROMANCERO

Los romances son cantos tradicionales, poesía anónima, colectiva que se transmite de generación en generación y vive en las variantes que se le introducen en ese rodar a través del tiempo.

La características fundamentales son:

Liricidad y dramatismo; surgen como consecuencia de la modificación que experimentan los elementos narrativos. Estos se desarticulan, o se suprimen, cuando no parecen esenciales, en beneficio de un más hondo lirismo. Abundan así, las exclamaciones, las reiteraciones, las enumeraciones simétricas, reveladoras de la emotividad. Los diálogos asumen primordial importancia, su función es iluminar el alma de los protagonistas de la escena. Y esos diálogos se dan habitualmente sin indicación del personaje que hable (sin verbo introductor que lo anuncia); su consecuencia es la velocidad y el predominio de los elementos afectivos, impulsivos y dramáticos.
El diálogo; vivifican la narración y a veces ocupan todo el romance.
Descripción fugaz y enumeratoria; se utiliza de modo fugaz y rápido (apenas como un detalle de la narración).
Fragmentarismo; muchos o la gran mayoría de los romances son fragmentos que provienen de textos más extensos (cantares, epopeyas, etc.) se selecciona la parte que despierta mayor interés en el público, esto hace que se prescinda de los preliminares, incidentes y desenlace, para destacar solo la situación escogida o una rápida serie de sucesos centrales. Este procedimiento presenta dos aspectos; comienzo abrupto y final trunco.
Comienzo abrupto; se omite la presentación de los personajes y de las circunstancias que motivan su presente modo de actuar.
Final trunco;  cuando el canto ha mostrado los elementos que considera capaces de suscitar la emoción, suele, multiplicándola, detenerse en el umbral del desenlace sin descifrarlo.
Lo irreal e impreciso; el romancero tiende a lo inmotivado, vago y misterioso, esto le otorga mayores encantos poéticos.
Irregularidad en el uso de los tiempos verbales; esta, a veces obedece a la métrica del verso, otras a la rima.
Reiteraciones; repetición de algunos términos (de la misma palabra o usos derivados).
Uso del diminutivo; es de carácter estético - valorativo, el hablante se detiene en la representación imaginativa del objeto, para empequeñecerlo (no importa el tamaño real) y valorarlo así sentimentalmente, rodeándolo de su afecto.
Austeridad expresiva; no abundan los elementos puramente ornamentales. la adjetivación se reprime y la palabra descarnada, concisa, sin artificios, es el instrumento apto para la creación poética.
Gusto por lo suntuario; preferencia del pueblo por los objetos lujosos, se repiten las evocaciones de joyas, metales preciosos, telas finas, etc. Es un procedimiento artístico, un recurso que sirve para esmaltar, confiriéndole colorido, el sencillo lenguaje poético.

Extraído de:
Gutiérrez Rivera, Ibero. Introducción al Romancero.

 

jueves, 14 de agosto de 2014

LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO

5° Biológico 1

Enlace para que bajen: La parábola del hijo pródigo:

https://www.ewtn.com/spanish/Lecturas/lucas_15.htm
 

LAS PARÁBOLAS Y SUS CARACTERÍSTICAS


5° Biológico 1

1. DEFINICIÓN

Parábola deriva del griego "parabolé", término que sugiere una comparación. Una parábola es un relato corto, con forma de historia sencilla, real o inventada pero no fantasiosa, mediante la cual Jesús establece una comparación: "igual que sucede en tal caso, así sucede en tal otro". Esta comparación pretende mostrarnos una enseñanza de tipo "espiritual". No tenemos que olvidar que Jesús fue un predicador itinerante, y las parábolas son explicaciones y anuncio de su mensaje.
La parábola es diferente de la metáfora que consiste en una palabra usada con un significado o en un contexto diferente al habitual. Respecto a la alegoría se diferencia en que en ésta todos los detalles y figuras tienen significado, aunque en algunos casos sea forzado, mientras que en la parábola, todos los detalles tienen la finalidad de subrayar y enfatizar el mensaje único que el relato quiere enseñar. (Algunas parábolas sí tiene elementos alegóricos.) De las fábulas se diferencia en que intervienen personajes humanos.

2. CARACTERÍSTICAS

a) Tienen forma de narración, una especie de cuento de tamaño variable.
b) Son relatos de la vida diaria. No son asuntos complejos ni rebuscados. Los elementos que las constituyen están tomados de experiencias cotidianas de Jesús y sus oyentes: semillas, ovejas, deudores, prestamistas... Por eso se dice que son relatos verosímiles, no fantasiosos. En muchos casos la trama y sus elementos están tomados de la vida y muchos oyentes de Jesús habrán tenido la misma experiencia.
c) Lo anterior no excluye la posibilidad de que aparezcan otros recursos literarios como la hipérbole o circunstancias extrañas, exageraciones de difícil justificación a no ser que aceptemos que la finalidad de las parábolas sea suscitar la reflexión.
d) El interés de la parábola no radica en el relato, pues se trata de un relato simbólico. Hay un conjunto de símbolos y un mundo simbolizado. El conjunto de símbolos de la parábola está puesto al servicio de la enseñanza que Jesús quiere transmitir a sus oyentes.
e) Es este carácter simbólico lo hace que la parábola ayude a comprender y asimilar el principio de trascendencia que envuelve toda la temática religiosa y cristiana. Porque es a través de lo simbólico como podemos descubrir la intervención de Dios en la historia. El mejor lenguaje para hablar de Dios es el simbólico.
f) Las parábolas no son un método original y exclusivo de Jesús. Era una técnica utilizada por otros rabinos, pero en las de Jesús hay detalles que causan sorpresa y plantean un reto.
g) En general, las parábolas evocan experiencias desconcertantes y en casi todas late una paradoja que rompe los esquemas usuales de la vida: hay comerciantes que lo venden todo para comprar sólo una perla fina (¿de que vivirá después?, hay un padre que recibe y devuelve sus bienes al hijo pródigo que había dilapidado todo, un sembrador que malgasta la semilla en el camino y en las zarzas...
h) Las parábolas fueron instrumentos que Jesús usó para exponer su mensaje a la gente sencilla. Pero en ocasiones también las usó como arma dialéctica contra los líderes religiosos y sociales.
i) Los destinatarios de las parábolas eran gente sencilla del pueblo.
j) Jesús utiliza las parábolas porque busca la claridad. Habla en parábolas porque quiere que la gente le entienda. No son enigmas, a la gente le fascinaban precisamente porque las entendían.
3. FINALIDAD
Jesús no contaba parábolas para divertir al auditorio sino para exponer su mensaje, explicitarlo y aclararlo, y muy especialmente, para interpelarles.
a) Uno de los propósitos fundamentales de las parábolas de Jesús es exponer los principios fundamentales de su enseñanza. El centro del mensaje de Jesús es el Reino de Dio y las parábolas pretenden desvelarnos un aspecto fundamental de este Reino. Para el judío de aquellos tiempos el Reino de Dios era la personificación de la esperanza de salvación, la llegada del Reino de Dios se aguarda como liberación, como realización de la paz y la justicia. Jesús imprime a esta esperanza escatológica una dirección nueva: el Reino de Dios se cumple ahora. No sólo comienza a cumplirse el Reino, comienza también el escándalo. Un desconocido con un grupo de incultos, rodeado de gente de mala fama ¿iba a hacer realidad la esperanza del cambio, el Reino de Dios? No parecía fácil la empresa. la gente permanece incrédula y desconcertada. Es comprensible que en esta situación Jesús comience a hablar del Reino de Dios en parábolas: el grano de mostaza, que es la más pequeña de las semillas; la levadura que fermenta y crece; el sembrador...
b) El mensaje del Reino no sólo se "conoce", hace falta construirlo. Por eso Jesús busca una reacción en el oyente. Esto lo logra con unos finales imprevistos y desconcertantes de las parábolas. Sus finales rozan lo absurdo (p. e. dejar crecer el trigo con la cizaña) causando sorpresa en el oyente. No se puede entender que alguien escuchara una parábola a Jesús y permaneciera impasible ya que cuestionan el orden social, moral y religioso de su tiempo. El mensaje del Reino de Dios como nueva sociedad justa, fraterna y solidaria implica radicalidad en las decisiones. Por eso, las parábolas incitan a comprometerse a favor de Jesús y su mensaje o a rechazarlo.

Una de las características de la parábolas es que son desconcertantes. Incluso se pueden plantear situaciones absurdas. Si Jesús hace este planteamiento es porque quiere resaltar especialmente algún aspecto del Reino, alguna característica del Dios; o cómo debe ser el comportamiento de los hombres . Éstas son las principales parábolas y relatos parabólicos de Jesús, éstas son algunas de las preguntas de fondo que suscitan.

Extraído de: